Atrás y detrás son dos adverbios de lugar que se parecen mucho,
pero no son iguales. El primero, atrás, implica movimiento real o figurado, y por tanto significa ‘hacia la
parte que está o queda a la espalda de uno’. Ejemplo: Le hice frente y se echó atrás. El segundo, detrás, indica situación, significa ‘en la parte que está o
queda a la espalda de uno’.
Ejemplo: Se situó detrás de mi hermana.
Atrás nunca admite un
complemento que lo especifique, es incorrecto decir *atrás de mí, pero detrás sí lo admite: Está detrás de la acequia. Eso sí, lo admite introducido por la preposición de, no de forma directa, por eso no son correctas las
formas *detrás mía, *detrás
suyo o *detrás vuestra. Se suele pensar que el
error está en la concordancia de género y una pregunta
muy común es: “Siendo un chico, debo decir *detrás mío o *detrás mía?”. Ni una ni otra: detrás no
tiene género y además no puede ser modificado sin mediar la preposición de.
La mejor manera de no equivocarse es probar a colocar el
posesivo delante. Un ejemplo nos lo aclara: Estoy detrás de Olaf. Ahora con posesivo delante: Estoy en su
detrás. No suena, ¿verdad? Pues eso indica
que tampoco es correcto *Estoy detrás suyo, seamos del sexo que seamos.
Me gusta este blog.
ResponderEliminarCon respecto a esta entrada, quizá la confusión viene porque sí es correcto usar posesivos en expresiones con alrededor, al lado, a la vera y puede que alguna otra. Por ejemplo: "al lado mío, a mi lado; alrededor nuestro, a nuestro alrededor; a la vera mía, a mi vera", etc. Pero siempre concordando el género: lado y alrededor son palabras masculinas, y vera femenina. *Siéntate aquí al lado mía, *No estés alrededor mía, *Quítate de la vera mío.
Bien explicado.
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