El término libido da bastantes quebraderos de cabeza, quizá por paralelismo con su significado, que es 'deseo sexual', y ya sabemos que el deseo sexual y la búsqueda de su satisfacción pueden traernos por la calle de la amargura. El caso es que con libido, una sola palabra, podemos cometer hasta cuatro errores, tres de ellos al unísono:
1. Convertir la palabra, que es llana, en esdrújula: *líbido.
2. Confundirla con el adjetivo lívido, que significa 'amoratado' o 'intensamente pálido'.
3. Cambiarle el género. Libido es femenino, aunque acabe en -o: la libido, nunca *el libido.
4. Añadirle el adjetivo sexual, lo que es una redundancia, porque libido ya incluye la idea de sexual. No hay una libido gastronómica o cinematográfica, solamente puede ser sexual.
¡Lo que da de sí una palabra!
http://lema.rae.es/drae/?val=libido
http://lema.rae.es/drae/?val=l%C3%ADvido
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